Los profesionales de la salud son valiosos aliados para las compañías farmacéuticas, ya que se esfuerzan por monitorear el perfil de seguridad de sus medicamentos y promover el uso seguro y eficaz de sus productos. Las buenas prácticas de farmacovigilancia de las empresas farmacéuticas tienen el poder de generar confianza entre los pacientes cuando utilizan sus medicamentos.
Además, los datos de seguridad consistentes y sólidos recopilados en la fase posterior a la comercialización pueden disipar mitos y rumores sobre reacciones adversas a los medicamentos (ADRs, por sus siglas en inglés).
Por este motivo, es fundamental que las compañías farmacéuticas compartan la cultura de notificación entre los profesionales sanitarios que son los principales proveedores de notificaciones espontáneas de ADRs